El calentamiento global está socavando a nuestro planeta de maneras devastadoras. Aunque todavía no está bien entendida la conexión entre el clima y la salud, cada vez queda más claro la fuerte conexión que tienen.
Las tormentas se están volviendo más intensas y mojadas, lo que provoca inundaciones masivas e incluso deslizamientos de tierra, provocando desplazamientos y/o hasta muertes. Esto no sólo destruye la vida y la propiedad, sino que también aumenta el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua, como la cólera. Estas tormentas han pegado más fuerte a las comunidades más vulnerables haciendo que los brotes de enfermedades sean cada vez más difíciles de contener.
Las olas de calor son cada vez más frecuentes y duran más tiempo, causando miles de muertes al año. La mayor parte de la población no está preparada para el calor extremo y no tienen acceso a refrigeración o alivio. La ola de calor de Europa en 2022 tuvo una fatalidad de alrededor de 22,000 muertes [Bloomberg].
Asimismo, las sequías también están aumentando en frecuencia y duración; esto causa hambre extrema y reducción del consumo de nutrientes, lo que afecta el desarrollo de los niños y, en algunos casos, la muerte. Estas sequías también destruyen los cultivos y la vida silvestre, lo que afecta las economías locales.
Temperaturas más cálidas significa que portadores de virus, como por ejemplo la malaria, zika o Lyme, como lo son los mosquitos y las garrapatas puedan sobrevivir y explorar nuevas regiones.
Debido a lo anterior, estas enfermedades se pueden propagar más lejos que antes afectando a un mayor número de la población. El cambio climático también aumenta el riesgo a pandemias, con el creciente contacto entre humanos y animales debido a las continuas perturbaciones al ecosistema.
En general, el calentamiento global está afectando los climas extremos de maneras devastadoras. Esto está provocando inundaciones, olas de calor, sequías y otros efectos que afectan a la vida y la propiedad de personas en todo el mundo. Es importante que tomemos medidas para reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero para evitar un futuro aún más sombrío.
Como dijo Winston Churchill: "Nunca hemos tenido que afrontar un desafío tan grande como el cambio climático, pero tampoco hemos contado con la capacidad de abordarlo".